NO HAY LINEA FINAL

Agustín Artiles Grijalba –Champi-

(Ryan Casey/CHSAANow.com)

No te lo puedes explicar, hace tan solo una semana realizabas tu mejor marca personal en una competición sin transcendencia y hoy tu actuación no ha sido ni de lejos la esperada. Puede que  hayas competido genial por la mañana en una prueba determinada y en la jornada de tarde no logres ni de lejos similares prestaciones en el mismo estilo y distancia.

Cuando esto ocurre no implica necesariamente que la preparación no discurra por el camino adecuado. Pueden existir innumerables circunstancias para que esto suceda y no por ello debes dejar de insistir en tu preparación. Quizá sea una buena oportunidad para darte cuenta de que pasta estás hecho, comprobar tu fortaleza mental, tu espíritu de superación ante las adversidades y hasta donde estás dispuesto a entrenar para alcanzar tus límites.

Lamentarse y buscar pretextos para justificar una inesperada derrota no es la mejor solución y además dañará tu credibilidad. Las siguientes ideas tal vez te pueden ayudar a  ver las cosas desde otro prisma y te permitan persistir en tus aspiraciones y no claudicar fácilmente.

1

Aunque a veces puedes desconfiar de tu preparación, jamás lo hagas de tus posibilidades.

2

Cuando esto sucede puedes elegir entre levantarte triste y cansado o hacerlo con energía en tus músculos e ilusión en tus pensamientos

3

Arriesga y no te conformes, evita ser un mero espectador de tu preparación y en las competiciones sé decidido, asume el protagonismo y lánzate en busca de la recompensa a tu esfuerzo.

4

Recuerda que haces lo que te gusta y te motiva, disfruta del trayecto que te lleva a la meta.

5

Se apasionado con tus objetivos, busca la perfección y disfruta con la preparación.

6

Busca retos difíciles y acordes a tu nivel. Cuanto mayor sea la dificultad de tu objetivo más satisfacción personal y reconocimiento obtendrás

7

Cuando menos lo esperas y más lo necesitas, puede llegar tu oportunidad. Debes estar preparado.

8

Si logras una victoria inesperada mejorarás tu confianza y autoestima, te invitará a soñar de nuevo a intentarlo con más decisión, a entrenar con mayor determinación y a superar las dificultades

9

Sé en todo momento exigente contigo mismo, analiza tus actuaciones y asume la responsabilidad de tu preparación.

10

No temas lograr tus deseos, decídete a ser grande y dale una oportunidad a esa fuerza interior que posees y que está deseando salir a tu encuentro. No dejes que las dudas y las críticas ahoguen tus intenciones y permite que tus opciones brillen con luz propia.

La distancia entre el deseo y el éxito se reduce con el entrenamiento. No hay línea final, tan sólo nadadores que abandonan antes de llegar a la meta y lo único que debes temer es no ser capaz de intentarlo.

Imágen

http://chsaanow.com/sports/boys-swimming/

(Ryan Casey/CHSAANow.com)