Agustín Artiles Grijalba – Champi-
Hace más de 1 hora que tus compañeros de equipo se fueron a vestir y no vislumbras el final de la sesión de entrenamiento. Llevas casi 3 horas nadando y aún te faltan 10×300, los brazos apenas responden y ansías con todas tus fuerzas que el entreno se acabe.
No puedes más y sientes que el tiempo se detiene por instantes, tus movimientos se vuelven más lentos y tu mente te aconseja que pares. Te concentras y tarareas tu canción favorita, de nuevo un viraje, te impulsas y compruebas que el crono marca 3 segundos más del parcial adecuado, aprietas los dientes, pones a prueba tu orgullo y aumentas el ritmo de tus brazadas.
¡Todo menos rendirte!
Eres FONDISTA, una especie en extinción y si algo te caracteriza y te hace diferente del resto de nadadores es tu corazón indomable, una fuerza mental que impulsa tus acciones y una motivación brutal que imprime a tus actuaciones un halo de heroicidad y entereza bárbaras, finalizas la sesión, recibes la felicitación de tu entrenador y le preguntas que series harás mañana.
Dedicado a todos los fonderos, aquellos que a diario ponen a prueba sus límites, que se inyectan kilómetros de ilusión en sus venas y que hacen del compromiso y tenacidad el mayor de sus privilegios.