Agustín Artiles Grijalba -Champi
44 años atrás en el túnel del tiempo, Múnich 72. Tengo 11 años y en la televisión de mi casa siempre aparece un americano con bigote, al que todos llaman Mark Spitz. Es un fiera, lo gana todo y no para de conseguir medallas y de pulverizar records mundiales.
Dicen los entendidos que en México 68 fracasó y que desde entonces no dejó de entrenar, qué su ambición no tenía límites y que se prpuso lograr lo que nadie antes pudo, 7 medallas de oro.
Flipo y quiero ser como él, saco pecho y me hago una promesa, Seré olímpico.
Las hazañas de Spitz y su impacto en nuestro deporte fueron enormes. Sirvieron por aquel entonces para que muchos nadador@s quisieran emular sus pasos y apuntarse a las piscinas. Sus medallas y victorias las sentíamos como propias y a todos de alguna manera nos hubiera gustado parecernos a él.
Difícil comprender entonces que algo más de 4 décadas después un muchacho de 31 años de Baltimore lograría alcanzar la friolera de 21 medallas de oro en unos Juegos olímpicos y se convertiría por méritos propios en el deportista más laureado en unas olimpiadas y para much@s, entre los que me incluyó, el mejor deportista de la historia y un referente para que nuestro deporte alcance la grandeza que se merece.
Los Juegos olímpicos tienen ese aurea especial que le diferencia de los más grandes eventos. Puede que seas el mejor en todas las competiciones, no pares de batir plusmarcas mundiales, pero si no alcanzas el oro olímpico tu historial deportivo parecerá incompleto.
En mi opinión la final masculina de 200 mariposa de Río tuvo todos los componentes de las grandes gestas olímpicas. Es cierto que Phelps no consiguió batir el record del mundo, pero la transcendencia de su victoria en nuestro deporte superó con creces todas las previsiones.
Algunos de esos ingredientes los enumero a continuación
ANTECEDENTES
La final venía precedida por la victoria en semifinales del veterano nadador Húngaro Laszlo Cseh, Campeón del Mundo, de Europa y recordman mundial en varias ocasiones. Siempre a la sombra de Phelps y de Lochte, que tiene en esta ocasión la oportunidad de lograr el oro olímpico y es además uno de los grandes favoritos para el triunfo final, acompañado también por un joven compatriota, Tamas Kenderesi, de 19 años de edad y que en semifinales paró el electrónico en unos excelentes 1.53.96
La carrera representa también de alguna manera la revancha de Michael Phelps ante el sudafricano Chad Le Clos, que con un tiempo de 1.52.96, le arrebató por 5 centésimas la medalla de oro en Londres 2012. Por si fuera poco la prueba viene precedida también por la manera de concentrarse en la prueba de ambos en la cámara de llamada y en la que el sudafricano realiza movimientos propios del boxeo, como si de Gary Hall se tratara y que muchos interpretan como una manera de “provocar” y descentrar al americano, que mantiene su rostro imperturbable en todo momento., con una mirada y determinación impresionantes.
LA CARRERA
Laszlo Cesh lanza la prueba y pasa en primera posición con un parcial de 0.24.77, ocho centésimas por delante de Phelps, que con 7 batidos se coloca en cabeza, para pasar en el hectómetro en un tiempo de 0.53.35, 43 centésimas mejor que Laszlo y 52 que Le Clos.
En los 150 toca de nuevo en 1ª posición, plaza que mantiene hasta el final, aguantando la embestida del Japonés Masato, que hace un último 50 de escándalo en 0.29.38 y recupera 1.30” con respecto a Phelps, quedándose a tan solo 4 centésimas del oro olímpico. Kenderesi termina en tercera posición a 26 centésimas del americano y se erige como una de las grandes figuras de la prueba en el futuro
NADADOR | PARC1 | PARC2 | PARC3 | PARC4 |
PHELPS | 0.24.85 | 0.28.80 | 0.29.33 | 0.30.68 |
MASATO | 0.25.37 | 0.29.98 | 0.29.38 | 0.29.67 |
KENDERESI | 0.25.42 | 0.28.76 | 0.29.43 | 0.30.01 |
LE CLOS | 0.25.06 | 0.28.81 | 0.29.48 | 0.30.71 |
SETO | 0.25.06 | 0.29.18 | 0.29.34 | 0.31.24 |
BROMER | 0.25.60 | 0.30.41 | 0.29.26 | 0.31.37 |
CSEH | 0.24.77 | 0.29.01 | 0.31.37 | 0.32.65 |
CROENEN | 0.25.78 | 0.29.86 | 0.30.38 | 0.31.02 |
LA PRESIÓN DE LA CALLE 4
Si observamos detenidamente las finales celebradas podremos comprobar como muchos nadador@s que se clasificaron en la calle 4, al final no lograron el triunfo. La motivación y el impulso que implica para alguno@s deportistas competir por esa calle, para otros ejerce en mi opinión una acción contraria, que provoca que ese favoritismo suponga en los Juegos Olímpicos una carga o presión excesiva, que no todos son capaces de soportar y que les le lleva incluso en determinadas ocasiones a quedarse fuera del pódium final.
LASZLO CESH, NUEVA OPORTUNIDAD PERDIDA
Laszlo Cseh, que tan solo hace unos meses en el europeo de Londres venció con un tiempo de 1.52.91, marca que le hubiera dado la primera plaza y la medalla de oro, no encuentra de nuevo el camino hacia la gloria olímpica y se derrumba en una 7ª plaza, impropia de su categoría, terminando los últimos 50 metros de la carrera en un pobre registro de 0.32.65.
CEREMONIA
Sin duda uno de los momentos más emotivos de los Juegos olímpicos. Michael Phelps tremendamente emocionado, escuchando el himno de su país y que sube posteriormente a las gradas para recibir la felicitación y los abrazos de sus familiares.
El triunfo de Michael Phelps representa mucho más que una simple victoria, o la obtención de una medalla de oro. Aquel osado jovenzuelo que un día predijo que cambiaría la natación, ha cumplido con creces aquella promesa y si Mark Spitz en Munich nos encandiló a much@s en nuestra infancia, Phelps lo hace 40 años después y nos manda de paso entre otros muchos recados, uno repleto de contenido y atrevimiento, que además avala algunas de mis creencias que ya expuse en anteriores publicaciones y que adjunto una de ellas en el siguiente enlace.
https://nadandoconchampi.com/2015/04/04/el-poder-de-la-experiencia/
En determinadas circunstancias la fecha de nacimiento no debería estar reñida con el talento. La edad de un nadador no es necesariamente lo más importante y que lo que realmente interesa es la calidad de sus pensamientos y la magnitud de los retos.
Phelps ha demostrado que se puede ser Campeón Olímpico a los 31 años, cuando casi nadie lo esperaba y de paso les indica a sus más fervientes rivales que todavía es el mejor y que si quieren vencerle, necesitarán algo más que lanzar puñetazos al aire.
“Al Rey no se le provoca”
Imágen
Foto 1: http://www.biografiasyvidas.com/biografia/s/spitz.htm
Foto 2:
,http://www.rtve.es/deportes/20160810/michael-phelps-recupera-su-trono-200-mariposa/1384160.shtml