Agustín Artiles Grijalba -Champi-
No consigues encontrar una explicación lógica a tu bajo rendimiento y la nueva situación te supera. Hace tan solo un par de temporadas conseguías varias mínimas nacionales y en la actualidad apenas te puedes acercar a tus marcas de antaño.
Cuando esto ocurre no implica necesariamente que la preparación no discurra por el camino correcto, pueden existir innumerables circunstancias para que esto suceda y no por ello debes dejar de insistir en tu preparación. Quizá sea una buena oportunidad para darte cuenta de que pasta estás hecho, comprobar tu fortaleza mental, tu espíritu de superación ante las adversidades y hasta donde estás dispuesto a entrenar para alcanzar tus límites.
La decisión es tuya. Puedes elegir entre levantarte triste y cansado o hacerlo con energía en tus músculos e ilusión en tus pensamientos. Ser un mero espectador de tu preparación, ahogarte en lamentaciones, o por el contrario asumir el protagonismo y lanzarte en busca de la recompensa a tu esfuerzo.
Al fin y al cabo haces lo que más te gusta y cuando menos lo esperes puede llegar tu oportunidad. Activa esa fuerza interior que posees y que está deseando salir a tu encuentro. No dejes que las dudas y las críticas ahoguen tus intenciones y permite que tus opciones brillen con luz propia.
Lo más habitual es que se trate de un simple bache que se interpone en el camino, un obstáculo difícil de superar, que se presenta sin avisar y que te deja desvalido.
Toma las riendas, coge carrerilla de nuevo e impulsa tus metas.
Los siguientes Recursos no son el elixir de la verdad, se basan en la experiencia, en el sentido común y a los nadadores y a mí nos ayudado en situaciones delicadas.
- En tiempos difíciles, tranquilidad y trabajo.
- Asume rápidamente la situación. Acepta la eventual derrota y analiza junto a tu entrenador las causas de vuestro bajo rendimiento.
Si sabes dónde fallasteis, poner remedio será más fácil
- Lamentarse no es la mejor opción, la competición es pasado, piensa en positivo y no te dejes llevar por la desilusión. Se trata tan solo de un tropiezo en el camino
- Busca nuevos objetivos intermedios, a corto y medio plazo. De superarlos, ellos te conducirán al objetivo final
- ¡Ojo! Luchar contra una situación que no puedes superar te hará vulnerable, asumirla te reforzará
- Plantea metas lógicas. Al principio más asequibles y a continuación, más difíciles de lograr, pero siempre adaptadas a tus posibilidades.
- Aprovecha para aprender cosas nuevas, mejora ese estilo que siempre quisiste nadar, compite en otras distancias, fortalece tus puntos débiles, mejora tus virajes y salidas.
- Olvídate por un tiempo del cronómetro e incluso de la competición y céntrate en la preparación y en encontrar nuevas sensaciones que motiven tu rendimiento.
- Tal vez estés demasiado cansado después de jornadas intensas de estudios y exámenes y esa carga no te deje obtener tu mejor prestación. Incluye en la programación nuevos métodos de recuperación, haz lo que estimes oportuno, pero nunca pierdas la confianza, te vengas abajo y dejes de intentarlo.
- Habla con tu entrenador, el mejor que nadie sabrá dar una respuesta acertada al problema. Colabora con él, ejerce tu opción a opinar y no olvides que juntos formáis un equipo invencible y que por separado, jamás lograréis vuestros objetivos.
OTRAS ESTRATEGIAS
Variedad en los entrenamientos
Prácticas cortas y divertidas especialmente en nadadores jóvenes
Proyección de películas motivadoras.
Conocer los objetivos de cada entrenamiento
Entrenamiento individualizado
Técnicas de relajación
Corregir errores técnicos, en cuanto se produzcan
Tener paciencia y no quemar etapas
Planificación de objetivos, consensuados
Mostrar interés por el deportista
Establecer objetivos reales, lógicos y alcanzables
Potenciar aspectos secundarios del nadador
Fortalecer las cualidades
Ser positivo y transmitir ilusión
Apoyo familiar
Tratar al deportista como a un adulto
Aunque a veces el muro parezca imposible de superar, todo es posible. Recuperar la autoestima después de una repentina derrota, ascender un peldaño más en tu preparación y lograr nuevos objetivos serán siempre más asequibles si conoces las causas que te impiden progresar, si persistes en tus intenciones, si no te dejas influir por tu desesperación y consigues que no te invada la tristeza.
“En eso consiste la magia de perder o ganar, en un instante el temor y el desaliento más absoluto y en el segundo momento de ese mismo instante, el júbilo y el entusiasmo más infinito”
Agustín Artiles Grijalba -Champi-
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