Agustín Artiles Grijalba -Champi-

¿Por qué conformarse con ser un nadador promedio, cuando tienes la opción de ser más brillante?
Qué importa que poseas un don especial para la natación y seas un buen estudiante, si en el momento de la verdad te conformas con implicarte lo justo. Por qué preocuparse de sacar un sobresaliente, si con un seis es suficiente. Para qué te vas a esforzar más de la cuenta en los entrenamientos, si con un par de mínimas nacionales cubres tus expectativas deportivas y acudirás sobrado al campeonato.
¿Cómo vas a tener la osadía de demostrar a los demás lo que realmente vales?
Es mejor reprimir tus aptitudes y dejan pasar oportunidades para las que estás preparado, en vez de no ser “aceptado” y de paso evitar ir en contra de una minoría que tienden a castigar el talento y que te exigen la mediocridad absoluta y por supuesto, no desviarte del rumbo trazado.
Ese conformismo «impuesto» no deja de ser una respetable elección, pero un tanto escaso de actitud y atrevimiento, no solo por los motivos expuestos, sino también por la decisión de no escapar de una zona de confort a la que te has acostumbrado y en la que te encuentras tranquilo y seguro, dejando escapar oportunidades de victorias y logros académicos muy sugerentes, a los que seguramente podrías aspirar si de verdad te lo propusieras, a cambio de una vida más apacible y corriente y no llevar la contraria a tus compañeros
PRINCIPALES MOTIVOS DEL CONFORMISMO
- Escasez de miras
- Falta de actitud y atrevimiento
- Baja autoestima
- Presión que ejercen los demás
- El qué dirán
- Refugiarse en una zona de confort segura
- Miedo al fracaso
- Temor a ser feliz
- Ausencia de ilusión para alcanzar nuevos proyectos
- Inseguridad por perder lo que se ha conseguido
- Sensación de Vértigo en las victorias importantes
- Por derrotas anteriores
- Por cultura y educación adquirida
- El esfuerzo que conlleva alcanzar nuevos logros
Nunca permitas que las dudas y las críticas acobarden tus intenciones y deja que tus opciones brillen con luz propia.
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