Agustín Artiles Grijalba –Champi-
Ni siquiera en nuestras mejores visiones pudimos imaginar un momento tan especial y que fuéramos capaces de hacerlo realidad en varias ocasiones.
El Centro acuático de Castellón con las gradas a rebosar de aficionados, fue el escenario elegido hace siete años, el gran teatro de los sueños que se convirtió de la noche a la mañana en una piscina única en la que dar rienda suelta a tanto entusiasmo
Allí estábamos pletóricos, como protagonistas principales del evento que marcó varios años nuestra carrera deportiva. Como cada temporada esperábamos con ilusión y cariño que este momento se hiciera realidad y no estábamos dispuestos a dejar pasar la ocasión de triunfar.
Parece que fue ayer la primera vez y aprovechando que este fin de semana se celebra una nueva edición de la Copa de clubes, me gustaría celebrarlo de nuevo con vosotros, recordar de alguna manera un instante único e irrepetible que jamás podremos olvidar.
Carecer de los medios adecuados para la preparación nunca nos impidió competir con los mejores, ni mucho menos ingeniárnosla para crear una atmosfera de entrenamiento y de competición adecuada para la práctica de la natación, donde se respiraba cohesión, entusiasmo y camaradería.
Aprendimos que los éxitos no llegan solos, que surgen después de mucho trabajo y esfuerzo y que si queríamos codearnos con los clubes más potentes necesitábamos forjar un alto grado de unidad, a través de la entrega desinteresada de todos los miembros, con la certeza de que el individualismo incontrolado de alguno de los nuestros nos privaría del objetivo final.
Un pequeño homenaje al equipo de nadadores del Club Natación Ciudad Real, por creer en lo que parecía imposible, por luchar contra corriente con la generosidad de un soñador y la firmeza del que se considera invencible, por hacer al corazón partícipe de todos sus retos y por haberos conocido.