Agustín Artiles Grijalba -Champi-
Sería adecuado pararse alguna vez a pensar la labor desinteresada y a veces poco apreciada que realizan algunas madres y padres, tener en cuenta el enorme sacrificio que supone para una familia tener un hijo nadador y valorar como merece el esfuerzo que realizan
Imagino que cada uno tendrá una opinión válida al respecto, pero personalmente yo quiero mostrar mi afecto y consideración a todas aquellos progenitores que hacen mi trabajo más fácil, que cooperan y contribuyen a diario con su inestimable aportación a que la que la preparación de sus hijos y las de sus compañeros de entrenamientos sea más asequible y eficiente, los mismos que estiman y respetan como merece la labor de los entrenadores y participan con su entrega y generosidad desinteresada al bienestar de los muchachos, sin ánimo de convertirse en protagonistas
Con su ayuda y algunas funciones que a continuación enumero y que realizan habitualmente todo resulta más fácil
- Se desplazan habitualmente al centro de entrenamiento, les acompañan e incluso aguardan pacientemente en la piscina para que puedan ejecutar la sesión de trabajo, a veces desde sitios lejanos, especialmente con los más pequeños.
- Asisten a competiciones largas y a menudo monótonas que les impiden disfrutar como merecen de sus jornadas de fin de semana de descanso.
- Aguantan con estoicismo los fracasos y las lamentaciones de los chicos cuando los resultados competitivos no son los esperados.
- Se convierten en el escudo donde se cobijan sus hijos cuando tienen una mala actuación y los que sufren los platos rotos ante una inesperada derrota.
- Con frecuencia son los encargados de costear los viajes de los hijos a campeonatos, por las dificultades económicas de los clubes.
- Son los responsables de hacerse cargo de los gastos propios de la actividad, que en ocasiones condicionan e influyen negativamente en la economía familiar.
- En determinados casos colaboran con el club en el correcto funcionamiento del mismo, sin mayor pretensión que el bienestar de los chicos
A los padres que aportan, animan a sus hijos en las buenas y en las malas, les inculcan su amor por el trabajo duro, el compromiso, la lealtad a los colores, el respeto al entrenador, a las normas de conducta y el aprecio al rival, que participan y ayudan, los quiero siempre a mi lado
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