Agustín Artiles Grijalba -Champi-

Los Records y el brutal estado de forma de Lidón Muñoz en un Nacional increíble. Los últimos metros de coraje y calidad de la joven nadadora del C.N Caldes Ainhoa Campadabal en un final de infarto, con premio europeo. La seguridad y el sentido del ritmo de la fondista del Galaico María Vilas, plasmado en todos sus parciales de la prueba de 800 Libre. La absoluta autoridad impuesta por la nadadora del Palma Aina Hierro en todas las distancias de mariposa y la incontestable victoria de  Paloma de Bordons (C.N Bahía de Cádiz) en la prueba corta de espalda, que le llevan a la selección y nos dejan un agradable sabor andaluz. Las dos mejores marcas nacionales de la prometedora ondina del C.N Lleida, Paula Juste en las pruebas de estilos y su triunfo en 400 libre, que valen billete para Glasgow. Los triunfos y la enorme calidad de Africa Zamorano en 100 y 200 espalda y los tres oros incontestables de la gran Jéssica Vall en las pruebas de braza, que permiten con sus conquistas que tres nadadoras del C.N Sant Andreu brillen por méritos propios en lo más alto del pódio de vencedoras.

Victorias mojadas en oro que nos saludan desde Gijón, dejan un dulce sabor a esperanza y nos regala ilusión y confianza en futuras victorias

¿Qué tienen en común todas ellas?

Son excelentes nadadoras, luchadoras e inconformistas, sobradamente preparadas. Sus actuaciones se cuentan  por victorias, sirven de aliento y efecto contagio a otras nadadoras que ven en ellas y sus conquistas motivo de inspiración, ejemplo de excelencia, de superación y de modelo a seguir.

Los deportistas necesitan ídolos a los que imitar. Ellas son de las suyas, tienen éxito y nada mejor que sus triunfos y el empeño que les caracteriza para motivar sus metas, contagiar de valor sus futuras actuaciones y emular sus conquistas. Logros que no son fruto del azar, basados en el trabajo duro, en una esmerada planificación deportiva de sus técnicos y en una confianza infinita en sus posibilidades, con la paciencia necesaria para alcanzar la cima y una capacidad de superación y de entrega en los entrenamientos que han contribuido a situarlas en el lugar que merecen.

Un gran ejemplo de superación para el resto de nadadoras.

En definitiva, hablamos de referentes atrevidas que hacen equipo, infunden valores, aportan tranquilidad, superación y coronas, que logran medallas de oro y títulos de Campeonas de España Absoluto, como en Gijón, brillan en el exterior, baten Records y por si no fuera suficiente todo lo expuesto comparten un sueño de cinco aros en común, formar parte del equipo olímpico español en Tokio 2020, o en sucesivas ediciones.

Campeonas que no les importa la intensidad y dificultad de sus retos, si son muy difíciles de conseguir y requieren de mucho trabajo, que les interesa superarse y sentirse capaces. Saben lo que quieren y si fuera necesario entrenarían hasta en la bañera de su casa con tal de alcanzar sus metas. Han saboreado en alguna ocasión la amarga derrota y han degustado en multitud de ocasiones las mieles del triunfo con actuaciones repletas de pasión y fuerza de voluntad que les imprimen valor y carácter.

Chicas, una meta no es tan solo un deseo que nace en los labios Por eso las victorias logradas en Gijón no solo engrandecen vuestro palmarés y engalanan de oro vuestro pecho. Esas presas y plusmarcas  por las que tanto suspiráis y trabajáis a diario en largas jornadas de preparación en vuestras piscinas representan en mi opinión algo más que una ilusión y una poderosa declaración de intenciones de cara al futuro.

Son como una romántica promesa de amor, un pacto de voluntad y compromiso con la excelencia que habita en vuestro interior y no solo presumen vuestros labios

Sois nuestras chicas de oro