Agustín Artiles Grijalba – Champi-

Miles de nadadores entrenan a diario en nuestro país todos los años, cada uno de ellos con sus propios sueños. Aproximadamente el 5% participa cada temporada en competiciones nacionales y tan solo un número reducido de ellos se cuelga una medalla

Un porcentaje importante deja de nadar en edad universitaria, algunos no llegan. Otros siguen en activo por su amor incondicional a la natación, haciendo verdaderas filigranas para poder compaginar deporte universitario y estudios con éxito, y cada vez son más nadadores los que consideran que la opción americana es lo mejor para su educación y su excelencia.

Como en cualquier otro deporte, solo los mejores tendrán la oportunidad de representar a España en el concierto internacional. Un número reducido de elegidos serán olímpicos y solo los más privilegiados nadarán la final y lograrán la medalla soñada.

Teniendo en cuenta todo eso, a pesar de la dificultad y responsabilidad que conlleva ser nadador, para ellos no hay nada mejor. Aceptan el reto con valentía, se comprometen a dar lo mejor de sí mismo y les gusta pensar que son parte esencial del proceso.

Con y sin medalla, con y sin olimpiada

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