Agustín Artiles Grijalba Champi-

Estoy hasta el gorro, el entrenador me ha regañado sin motivo. Dice que he faltado varios días a entrenar las tres últimas semanas y que así no me pondrá en la competición.  Es lo que digo, me tiene manía.

Si piensas que tu entrenador te tiene manía porque te llama la atención por no esforzarte lo suficiente, quizá es que le interesas. Piensa cómo te sentirás cuando te ignore y no te diga nada.

Si eres nadador y no te pone en el relevo. Si juegas al waterpolo, practicas un deporte de equipo y no te saca lo que quisieras, no significa necesariamente que no te lo merezcas, o sí.  Pudiera ser por infinidad de razones:

Tal vez le sobren motivos. Entienda que no te lo has currado lo suficiente en los entrenamientos, piense que no estés preparado y considere que es lo mejor para el grupo. Puede, que realmente tus compañeros pasen por un estado más óptimo de forma, que se trate de una cuestión táctica, que sean mejores, o simplemente y por qué no decirlo, hasta es posible que no te falte razón y pudiera al final equivocarse

 ¿Qué importan los motivos?

No te castigues. Escucha siempre al entrenador, él quiere lo mejor para ti y el equipo. Da todo lo que llevas dentro, sigue sus consejos, haz siempre lo que te mande y llegará tu oportunidad.

Si afrontas con entereza e inteligencia la situación, quizá no sea tan mala, puede valer la pena. Entrena mejor, no te rindas, compite con tus compañeros y hazle cambiar de opinión con tu entrega y determinación.

El deportista más valorado por un entrenador no siempre es el mejor y el que más medallas consigue, pero casi siempre el que mejor entrena.

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